Cd. Juarez, Chih.- Autoridades rusas han comenzado a tramitar a toda velocidad una serie de medidas encaminadas a encarcelar en el país a los prisioneros del Batallón Azov hechos en Ucrania, solo horas después de que Moscú asegurase que serían tratados “según los estándares internacionales”. Un diputado de la Duma (la cámara baja) ha propuesto incluso la pena de muerte. Gran parte de los 260 milicianos evacuados de la planta siderúrgica Azovstal, en Mariupol (sudeste del país) son parte de Azov. Los combatientes, entre los cuales hay 53 heridos, abandonaron la planta tras un acuerdo entre Ucrania y el Kremlin. El presidente ucranio, Volodímir Zelenski, no quiso hablar de rendición, pero Rusia si usó ese término, así como el de “prisioneros”. En Bruselas, la Comisión Europea anunciará este miércoles un plan de 210.000 millones de euros con una hoja de ruta para poner fin a su dependencia de los combustibles fósiles rusos para 2027 y acelerar su cambio a la energía verde lejos de Moscú. Además, el fiscal del Tribunal Penal Internacional ha anunciado el envío a Ucrania de un equipo de 42 expertos, el más importante en número de efectivos de la historia de la institución, para investigar las acusaciones de crímenes de guerra cometidos durante la invasión. En el terreno, Rusia ha lanzado ataques esta madrugada en la zona de Lviv, cerca de la frontera con Polonia, así como en la región de Chernihiv, en el norte del país.